Y era verde, todo verde. El pedido.
Me dijo: Se me rompe la bolsa de llevar libros; ¿me podrías hacer una?
Y nos fuimos a comprar tela, forro e hilo para coserla y paseamos la tarde.
Al día siguiente corté las piezas de tela y las piezas de forro y cosí con el hilo y todo quedó unido.
Y al otro día siguiente la tela, el forro y el hilo fueron formalmente presentados como “la nueva bolsa para llevar libros”, y en esa tarea siguen como bien podéis ver.
No hay comentarios:
Publicar un comentario