domingo, 6 de septiembre de 2015

Dedicada a Merche (perdón por el retraso) y a la muñeca de pelo largo.

Esta entrada estaba escrita desde Junio aunque por motivos inexplicables se quedó durmiendo en el cajón de los despistes. Ha pasado el tiempo y hemos hecho otro curso posteriormente. No me importa. Cuando la escribí disfruté describiendo un proceso y quiero presentarla en sociedad. Espero que a vosotros también os guste.


Noticias del cole de Washiningyo: os presento la última muñeca de papel que nos ha enseñado Merche.

Merche tiene una “mala” costumbre. Cada cierto tiempo se para a cavilar tranquilamente para buscar respuesta a una pregunta sesuda: ¿Y ahora, en qué lio puedo meter a mis chicas?, ¿Cuál será el próximo reto? Y de pronto, a finales de mayo, surgíó de las profundidades la respuesta: UN LAZO. Pues sí, resultó que esta vez iba a ser un lazo el causante de una reunión de ya incondicionales alumnas, a las que se unieron otras recien estrenadas incondicionales (las de hace uno, dos, o incluso tres cursos) y las que se presentaron como primerizas y que corren peligro de acabar uniéndose al grupo mientras el cuerpo y otras actividades lo permitan.
Y allá que nos vimos, en el siguiente curso, en el que en esta ocasión pusimos un lazo a la ningyo-muñeca de washi-papel y resultó que surgieron 7 muñecas diferentes, una por alumna-participante, algo que, por cierto, suele ser habitual.
Os presento mi Washiningyo. Para disfrutar del conjunto, visitad cierto blog que ya sabeis. Reto superado, otra vez. Hasta la próxima que seguro que no tardará. Por suerte.



Desconocemos la causa pero resulta que haciendo la misma muñeca, en teoría, acaban surgiendo tantas muñecas diferentes como personas se han juntado para hacerlas. El modelo es el mismo y en ocasiones hay quienes utilizan los mismos papeles para confeccionarlas. Sin embargo, parece que toman ese algo de la personalidad de la creadora que las hace únicas, y al mismo tiempo forman un hermoso conjunto ¿verdad?

Pd.- Hay un problema con los pelos que ya, ya. Las normas de etiqueta de las muñecas dicen cortos y cuando me entere, los de las mias estaban largos y así se quedaron. Desde entonces soy “pelos largos”.
Y ahora Merche nos propone muñecas “pelos largos”. Pero que falta de seriedad es esta.

Pd+.- Ya tenemos por delante el siguiente reto/curso.

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